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Reza para que se respete la dignidad y el derecho a la libertad religiosa de las personas encarceladas.
Reflexiona
Papa Francisco ha hablado de la cultura del descarte, una cultura en la que las personas son tratadas como objetos que deben ser desechados cuando no son "útiles". Esa cultura puede manifestarse en cómo nuestra sociedad trata a las personas en el sistema de justicia penal. En Arkansas, un musulmán tuvo que luchar en la corte para poder llevar una barba de media pulgada. De manera similar, los prisioneros judíos en algunos estados han luchado para que se les permita recibir comidas kosher. Recientemente, un musulmán en Alabama no pudo tener a su imán presente cuando fue ejecutado. La enseñanza católica sobre la libertad religiosa está arraigada en la dignidad de la persona humana. Esa dignidad no se pierde cuando una persona comete un delito. Y tradicionalmente, los católicos han entendido el ministerio a los prisioneros como una obra de misericordia. De hecho, los católicos esperan que las personas encarceladas encuentren fuerza en su fe. Para que la cultura estadounidense sea una a favor de la vida, no una cultura del descarte, nuestro sistema de justicia penal debe reconocer la dignidad de todas las personas.
Actúa
Averigua cómo puedes apoyar el ministerio católico en las prisiones. En muchas diócesis, Caridades Católicas coordina el ministerio carcelario. Comunícate con tu diócesis para ver qué puedes hacer para participar en este ministerio de atención a los encarcelados.